Android es una de las plataforma de móviles más popular y
utilizado en todo el mundo, pero no es la más adecuada si se refiere a cargos
que tienen una gran responsabilidad. En el día de la gran inauguración del
nuevo presidente de los Estados Unidos ha tenido que dejar su Smartphone que
hasta ahora venía utilizando, un Samsung Galaxy y ahora tendrá que conformarse
con un dispositivo encriptado y con muchas limitaciones.
Dentro de las preocupaciones durante la campaña hacia la
presidencia era que Trum era muy accesible, respondiendo a las llamadas de los
periodistas y a otros políticos, incluso si ese número era desconocido, y pues
ni que hablar de la soltura que tenía en las redes sociales, en especial con
Twitter.
Aunque no se tienen detalles sobre el terminal que va a utilizar
(Obama usó en un principio un Blackberry y más tarde lo cambio por un Galaxy S4
modificado), algo seguro es que Android en la versión comercial que tú y yo
conocemos no es un sistema lo suficientemente sólido para las altas esferas,
principalmente de las que conllevan una gran responsabilidad, como la de
administrar un país.
Los expertos advirtieron al actual presidente que el dispositivo
que utilizaba podría ser fácilmente hackeado e intervenir las comunicaciones, pudiendo
tener acceso a su ubicación, acceso a la cámara o hasta el micrófono, cabe
mencionar que es un peligro al cual todos estamos expuestos, pero para él las
consecuencias serían mucho más graves al tratarse de cargos públicos de este
nivel.
Algo cierto es que el sistema Android es uno de los sistemas
operativos móviles que suelen ser
objetos de malware y vulnerabilidades diversas, en este sentido otras
plataformas tampoco se libran.
Un ejemplo es el antiguo presidente, Obama consiguió conservar
su Blackberry cuando entro en la Casa Blanca en 2008, además tuvo que seguir
una serie de reglas estrictas y el dispositivo tuvo que recibir medidas de
seguridad adicionales, no estamos hablando de un Blackerry común, ya que este había
sido modificado para su uso por el presidente, dentro de las limitaciones a las
cuales estaba sujeto era a comunicarse con un circulo muy reducido tanto vía
llamada como por correo.
A mediados de este año Obama confirmo que había dejado su
viejo Blackberry por un dispositivo más moderno, pero no estamos hablando de un
iPhone ya que por cuestiones de seguridad no los podría utilizar, si no por un
Samsung Galaxy S4, pero nuevamente era un dispositivo muy limitado.
En el programa de televisión de Jimmy Fallon el actual expresidente
bromeo al decir que su nuevo móvil no podía realizar fotos, así como le impedía
utilizar funciones de enviar mensajes de texto o reproducir música, ni siquiera
podría hacer llamadas.
Hasta el momento no hay detalles del dispositivo a utilizar
por el nuevo presidente de los Estados Unidos, pero probablemente se trate de
un terminal basado en Android.
Pero a diferencia de Trum, Obama si tenía un dispositivo con
acceso a la cuenta oficial del presidente, sin embargo rara vez Obama pulsaba
enviar un tweet sin antes consultarlo con su equipo, en este sentido Trum tendrá
graves problemas al mantener su masiva actividad en redes sociales.